La combinación de manzana horneada con canela, un toque dulce y crujiente y por encima una porción de helado... es PERFECTA.
Definitivamente es uno de mis postres favoritos, así que hoy te muestro la receta ideal para que disfrutes de éste, sin culpa alguna.
Si bien la mayoría de recetas de crumble son a base de manzana verde, mi amiga y chef pastelera Brenda Martínez, me enseñó que la combinación de manzana verde y roja, regulan el grado de acidez y el resultado es mucho mejor, así que te recomiendo que lo hagas en la proporción que quieras (ej. 3 verdes, 2 rojas)
6 porciones
Tiempo de preparación: 40 minutos
INGREDIENTES:
5 manzanas (verdes y rojas)
Jugo de 1 limón
1 cuchara de canela
Chorrito de edulcorante líquido
1/4 taza de arándanos (opcional)
PARA EL CRUMBLE:
60g de avena
30g de harina de avena
1/4 taza de azúcar de coco o panela
100g de ghee
PREPARACIÓN:
Pre calentar el horno a 180°C. Por un lado, pelamos las manzanas y las cortamos en gajos de 0,5cm de espesor. Las acomodamos en una fuente apta para horno y espolvoreamos la canela, el chorrito de edulcorante y el jugo de limón. Mezclamos esto muy bien con ayuda de las manos y reservamos.
Por otro lado,para hacer el crumble, ponemos en un bowl la avena, la harina de avena y el azúcar de coco. Cortamos el ghee en cubos pequeños y lo agregamos al bowl (importante que esté frío para que sea másfácil manipularlo). Mezlamos todo esto hasta integrar y que se forme una textura como se fueran pequeños grumos.
Echamos el crumble sobre las manzanas, asegurándonos de cubrir toda la fuente. Aquí pueden añadirle arándanos, trozos de algún fruto seco o así tal cual llevarlo al horno por 20 minutos o hasta que toda la superficie esté dorada.
Te recomiendo acompañarlo con helado (de yogurt o el que prefieras), ya que la combinación con el crumble calientito es DE-LI.
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